Lesiones en tenis: ¿Cuáles son las más comunes?

En el tenis, la exigencia física, la duración media de los partidos y su componente psicológico, requieren una adecuada preparación.

Frenar, cambiar de dirección, desplazamientos laterales, esprintar, etc. ¿Qué les ocurre a nuestros pies cuando practicamos este deporte? En este artículo te vamos a contar todo lo que necesitas saber sobre las lesiones en tenis en los pies más frecuentes y cómo prevenirlas.

¿Cómo influye la pisada en las lesiones en tenis?

Las extremidades inferiores están sometidas a repetidas acciones de alta intensidad deportiva. Por este motivo, es común que aparezcan lesiones en esas zonas del cuerpo que más sufren.

La forma del pie, la forma de pisar y el reparto de cargas plantares puede afectar a la estructura del pie, el funcionamiento de las extremidades inferiores y el equilibrio.

Por otro lado, la rapidez de movimientos hacia delante y hacia atrás, tan naturales en el tenis, genera una tensión alta en las articulaciones como rodilla, tobillos y dedos de los pies. Precisamente, los dedos sufren especialmente al realizar movimientos y cambios de dirección rápidos y bruscos.

La articulación tibioastragalina juega un papel fundamental en la transmisión de la frenada y en la estabilización de la rodilla en los momentos habituales de cambio de dirección.

Cuanto más intenso es el partido, más sufren nuestros pies. Por ellos, los procesos de recuperación deben ir encaminados a tratar las patologías, alinear las estructuras articulares y controlar los daños que haya podido sufrir el pie en el tenis.

Tenis de élite frente a tenis amateur

Según algunos estudios, los jugadores de tenis de élite presentan algunas diferencias respecto a los jugadores amateur en cuanto a la estructura del pie y su influencia en la pisada.

Los primeros presentan una mayor altura del arco y una distribución de las cargas más elevadas en la zona media de ambos pies y en la parte posterior y lateral del pie derecho. Además, los valores de las cargas en el antepié (zona delantera del pie) son menores en los tenistas de élite.

Durante su día a día, los tenistas de élite presentan una supinación con arco alto y una mayor presión plantar. Esta situación viene acompañada de un descenso del cuboides.

Las lesiones en tenis más frecuentes que nos vamos a encontrar

Durante un entrenamiento o competición de tenis, existe el riesgo de sufrir lesiones tanto en los pies cómo en las rodillas y la cadera. Estas son algunas de las lesiones en tenis más comunes que puedes sufrir tanto si eres un tenista amateur como si eres un profesional del deporte:

Esguinces

Es la lesión más frecuente, ya que los desplazamientos laterales son muy habituales en este deporte.

Los esguinces pueden ser de diferentes grados según la gravedad de la lesión y pueden causar dolor, inflamación, hematoma y dificultad para caminar. Los jugadores que tienen los pies cavos, es decir, con un arco muy pronunciado, o que tienen los tobillos inestables o débiles, tienen más riesgo de sufrir esguinces. Para prevenirlos, es importante usar un calzado adecuado, calentar bien antes de jugar y fortalecer los músculos y ligamentos del tobillo con ejercicios específicos.

Rotura del tendón de Aquiles y tendinopatía de Aquiles

El tendón de Aquiles se puede lesionar de dos formas: por una rotura o por una tendinopatía. La tendinopatía de Aquiles es una inflamación crónica del tendón que causa dolor y rigidez y es una de las más frecuentes en el tenis.

Sucede por la gran activación de la cadena posterior en la posición de espera y a los movimientos explosivos, como saltar o correr, a los que se va a ver sometida esta musculatura. Un entrenamiento a medida, un buen calentamiento y un buen descanso, previenen estas lesiones.

Fascitis plantar

La fascitis plantar es una afección que causa dolor e inflamación en la planta del pie, especialmente en el talón.

Igual que sucede con las lesiones del tendón de Aquiles, la fascitis plantar se produce frecuentemente en el tenis debido a esos movimientos explosivos que realiza el jugador en contraste con la activación de la cadena posterior en la posición de espera. Es fácil confundir la fascitis plantar con espolón calcáneo porque los síntomas son similares así que es necesario contar siempre con la opinión de un especialista.

Dedos de tenista

Son hemorragias subungueales dolorosas frecuentes en el primer y el segundo dedo. Están asociadas con los movimientos y cambios de dirección rápidos y bruscos que sufren los dedos.

Problemas dermatológicos

Debido a los movimientos multidireccionales de este deporte, es habitual que aparezcan hematomas en las uñas.

Exceso de callos en los pies

Los pies soportan el movimiento deslizante del calzado contra el suelo, una acción abrasiva que favorece la generación de hiperqueratosis, vulgarmente conocida como callos, en los puntos de mayor presión y fricción. En ocasiones es posible confundirlos con papilomas en el pie, por lo que antes de intentar tratarlos por nuestra cuenta, es mejor acudir al podólogo.

¿Has experimentado alguna de estas lesiones? Para desarrollar un plan preventivo y adecuar un tratamiento para estas patologías del miembro inferior, ya sea mediante plantillas, infiltraciones en el pie o cirugía, recomendamos realizar un estudio biomecánico de la pisada y el servicio de quiropoida en tu clínica Podoactiva más cercana.