Claves para elegir el calzado de verano y mantener tus pies sanos

El verano ya está aquí. Suben las temperaturas y muchas personas comienzan a llevar zapatos abiertos y sandalias. Durante esta época, los pies sufren más debido al cambio de calzado y a una mayor exposición, puesto que gran parte de la población utiliza sandalias o lleva los pies al aire libre. Las patologías como infecciones, verrugas plantares, papilomas o grietas en los talones son los problemas más comunes durante este periodo estival.

Destacar que es importante saber qué calzado utilizar durante esta época del año para evitar posibles problemas o molestias que nos impidan disfrutar de las vacaciones o de la rutina diaria. A continuación te dejamos una ilustración con las “Tres claves para elegir el calzado de verano”, y más abajo te contamos toda la información detallada, junto a varios consejos de nuestros profesionales en podología.

 1. CALZADO ABIERTO Y TRANSPIRABLE

El calzado durante el verano es un elemento muy importante y habrá que escoger el que sea adecuado para la salud de nuestros pies. Nuestro consejo es utilizar zapatos abiertos para dejar respirar nuestros pies ya que, durante el resto del año, los llevamos cubiertos.

Por otro lado, si el calzado es cerrado, utilizaremos zapatos que transpiren evitando aquellos que estén fabricados con materiales como el plástico. Es recomendable apostar por materiales naturales ya que conservan el pie más seco.

Si, a pesar de elegir zapatos fabricados con dichos materiales, tenemos una sudoración excesiva es recomendable utilizar polvos específicos para evitar la humedad y las posibles infecciones que derivan de ella como los hongos. También es importante cambiarse de calcetines varias veces al día para mantener el pie seco y saludable.

2. SUELA RESISTENTE

La recomendación de nuestros podólogos es escoger un calzado con la mayor sujeción posible y con una suela que no sea muy fina y plana, lo cual aumentaría sustancialmente la tensión generada en la fascia plantar, tendón de Aquiles, gemelos, etc.

Por este motivo, las sandalias deberían tener al menos 2 ó 3 centímetros de suela que nos aporte confort y evite, en la medida de lo posible, la aparición de estos problemas.

3. SUJECIÓN

La elección del calzado es fundamental y escoger unas sandalias con sujeción en el talón y el antepié será muy importante. El zapato perfecto es aquel que posee estas tres características:

– Recoge el pie y le da sujeción a la hora de dar el paso.

– Tiene unos buenos contrafuertes.

– Posee una suela que amortigüa cada paso.

Además, sería muy recomendable que fuese acordonado. Sin embargo, en verano, es complicado encontrar un calzado así y que además permita la transpiración de los pies. Por ello, a nuestros pacientes, les recomendamos escoger un calzado con la mayor sujeción posible y con una suela adecuada.

Descubre todo sobre las chanclas en este artículo “4 razones para no utilizar chancletas para caminar”.

¿QUÉ CALZADO DEBEMOS EVITAR EN VERANO?

Entre la gran variedad de zapatos que existen en el mercado, hay algunas opciones que los podólogos desaconsejan totalmente por sus características. Por ejemplo, el uso de chanclas de manera continuada y para largos paseos.

En primer lugar, las chanclas generan inestabilidad ya que apenas tienen sujeción. Por ello, al caminar, los dedos hacen un sobreesfuerzo para agarrarse al calzado por la parte delantera. Este trabajo extra puede influir en el desarrollo de diversas patologías como dedos en garra o fascitis plantar, entre otros.

No obstante, si que aconsejamos utilizar chanclas en zonas de riesgo de contagio como piscinas, vestuarios y gimnasios. De esta manera protegemos los pies y evitamos maceraciones y aparición de hongos.

CONSEJOS

Os dejamos estos dos consejos preventivos para evitar molestias en los pies durante el verano:

– Visitar al podólogo para realizarse una quiropodia, preferiblemente antes de ponernos las sandalias. De esta manera, el experto podrá observar si existe alguna patología, como hongos, verrugas y/o durezas, y poder tratarla en consulta cuanto antes.

– Una buena hidratación evitará en gran medida las grietas de los pies. Es importante usar diariamente una crema específica para garantizar su correcta hidratación.